Nuestra Villa
Nuestra villa

Citada ya en 1250 bajo el nombre de Pozollez como una de las parroquias dependientes de la Abadía de Medina del Campo y en 1256 con el de Pozoldes. En 1587 se le llama como Pozal de las Dos Iglesias, referencia que alude a la existencia de 2 parroquias en la villa, San Boal y Santa María.

Pozaldez es uno de los municipios que se encuentra dentro de la Denominación de Origen de Rueda, como así lo recuerda su nombre "Pozal de Hez" o "abundancia de vino", contando con el testimonio subterráneo de más de 100 bodegas que horadan casi un 50% del suelo municipal. Se encuentra a 44 kilómetros de Valladolid, dentro del itinerario que marca la vía férrea que une Madrid con Irún. 

Como monumentos a destacar: La iglesia de Santa María, del s.XVI, de mampostería y ladrillo; la iglesia de San Boal con su estilizada torre y ábside mudéjar; la Ermita de la Virgen de los Remedios y la Fuente del Caño de 1790.

Pozaldez se encuentra además, dentro de la llamada ruta del mudéjar, y tiene una de las iglesias más características en cuanto a este estilo se refiere, la Iglesia de San Boal, situada en la parte más alta del pueblo y cuyo ábside es lo único que se conserva de la iglesia románico-mudéjar. Es un perfecto semicirculo, adornado con series de arcos ciegos realizados en ladrillo, y sobre la cual se eleva altiva y vigorosa, su enorme torre barroca. El interior está compuesto de una sola nave, con varias capillas laterales, donde reina el estilo herreriano en sus capiteles, cornisas y pilastras. Destaca además el órgano barroco y el retablo renacentista del altar.

Otros edificios, son la Iglesia de Santa María y la Ermita de los Remedios. La primera es una iglesia con un estilo marcadamente herreriano, realizada también en ladrillo y donde su torre es de menor envergadura que la de San Boal. En su interior se guarda un magnífico retablo churrigueresco del siglo XVIII, así como diversos retablos e imágenes del XVII.

La ermita es una construcción más moderna, cuyo interés radica en su interior con la imagen de la Virgen de los Remedios del siglo XVIII y un Cristo gótico del siglo XV. Esta Virgen es procesionada cada domingo de mayo y le honran con una verbena por la noche.

Por último, su oferta turística se completa con la existencia de una casa rural y de un restaurante donde probar un riquísimo lechazo castellano.

 

Las fiestas se completan con un tradicional Verano Cultural durante los meses de julio y agosto, donde aparte de los tradicionales actos culturales, se desarrollan también actos festivos, como verbenas o suelta de vaquillas. Previamente a esta festividad, se habrá celebrado el 20 de mayo, San Boal, donde las peñas se harán dueñas de las calles, con bailes, diversos juegos y carruseles.